Hay veces que las familias deben hacer frente a situaciones
difíciles, que provocan dolor. El conflicto forma parte inevitable
de la convivencia, pero bien gestionado nos permite crecer y mejorar
las relaciones.
La Mediación
familiar constituye una vía a la hora de solucionar estos
conflictos, la persona mediadora será quien nos ayude, pero van a
ser las propias partes a través del diálogo, reconociendo el
problema y entendiendo la posición del otro, quienes van a buscar la
mejor solución, aceptada por ambas partes. |